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12:46 pm el 10 de Octubre del 2017

Clínicas del país definen propuestas de servicios mínimos en caso de huelga

RELACIÓN PRO ACTIVA CON LA DIRECCIÓN DEL TRABAJO
Al respecto, plantearon algunas pautas a aplicar y que dicen relación con unidades críticas que deben seguir funcionando al interior de los centros médicos.
Fuente: El Sur _Concepción

Durante el año 2016 se promulgó en Chile la Ley N° 20.940 que modifica el sistema de relaciones laborales. En particular, se establecieron regulaciones sobre los denominados “servicios mínimos” y “equipos de emergencia” en las empresas en que puede declararse la huelga para hacer frente a la prohibición del reemplazo interno y externo de trabajadores.

Bajo este parámetro es que Clínicas de Chile, a la cual pertenecen dos de la Región del Biobío, presentó un informe consultoría denominado “Pautas para la definición de servicios mínimos y equipos de emergencia para efectos del cumplimiento de dicha ley“.

Ana María Albornoz, gerenta general de la asociación gremial, comentó a este medio que frente a la implementación de la reforma laboral estimaron que como esta actividad tiene una característica bastante especial, que es trabajar con la vida de las personas, era útil tener una relación pro positiva con la Dirección del Trabajo, porque esta entidad pública, tal como quedó comanda da por la ley, es la que va a tener que calificar los servicios míni mos en caso de que las empresas no logren acuerdo con sus sindicatos.

SERIE DE PRESTACIONES

De ahí que, también, consideraron apropiado explicar sus inquietudes respecto a la seguridad de los pacientes y contarles como funciona una institución de salud, a fin de que se pudiera comprender que a pesar “de que a todos nos parece muy lógico que cuando hay una huelga queden funcionando todos los servicios de urgencia, las UTI, las unidades críticas y los pacientes que no son trasladables, también era clave que se entienda que para que esos servicios queden funcionando, se necesita una serie de prestaciones y acciones que se realizan en los distintos lugares dentro de las clínicas que también tienen que seguir operando“.

A juicio de la ejecutiva, esto va asociado a que para poder tener una persona en la UTI se necesita hacerle exámenes, alimentarlo, entregar medicamentos, tener acceso a la ficha clínica, si llega un paciente GES hay que poder informar a la autoridad a través de un sistema computacional, se deben tener las instalaciones adecuadas y para eso se debe contar con informático.

Es decir, se necesita una estructura que es como una columna vertebral para poder atender pacientes críticos y no solo esas unidades.

Aclaró que establecer los servicios mínimos se deben definir en un momento previo a la negociación colectiva, porque en este proceso es posible llegar a una huelga. De ahí es que como se tendrán que poner de acuerdo con los sindicatos, les pareció prudente explicar como funciona una institución de salud.

Una cosa que dejó en claro que como asociación, respecto de los procesos que ocurren dentro de las clínicas, no tienen registro sobre inactividades post negociación y no les corresponde incursionar en materias que le son propias de cada centro. En todo caso, reconoció que como tienen información de prensa, han existido paros en el sector y por eso estimó que es bueno que la ley laboral haya establecido estos servicios mínimos en esta actividad que es clave.

Ana María Albornoz clarificó, también, que como cada centro asistencial tiene distintos niveles de complejidad, no hay una definición precisa de cuántos trabajadores se necesitan y de qué tipo, sino que hay unos rangos que están considerados.

Nosotros hicimos primero una presentación a la Dirección del Trabajo cuando entró en vigencia la normativa y ahora entregamos otro documento con muchos más elementos, para lo cual contratamos una empresa externa, que hace referencia a las dotaciones mínimas de cada servicio y cada clínica deberá basarse en su tamaño, los servicios que entrega y las complejidades que posee“, apuntó.

Lo clave de todo esto que se definieron las pautas para las cuales Mauricio Márquez, economista y consultor que trabajó en la elaboración de este informe, esclareció que esto hay que definirlo desde la perspectiva de la integralidad.

Cuando se planificó este trabajo, desde las expectativa de los procesos asistenciales, se hizo un seguimiento a cada paciente tipo, sobre las prestaciones que demandaba para lograr su recuperación. “Por ejemplo, cuando alguien entra a un servicio de urgencia, no solo pide atenciones médicas o de enfermería, sino que también exámenes de laboratorio, radiología, algunos insumos, si hay una fractura se necesitan vendas, yeso y una serie de aplicaciones. También si eventualmente hay un caso más complejo que requiere hospitalización y eventualmente una cirugía“.

Eso supone un conjunto de servicios que le prestan a estos asistencias madres y es así que están relevante, quizás, el operador de caldera como, probablemente, la atención médica que tuvo que dar.

El experto agregó que al mirar esto desde el punto de vista de la integralidad, se hace desde la experiencia de como funciona, pero también desde el punto de vista de lo que establece la misma regulación, que se entiende como la normativa y leyes que rigen a este sector, las cuales son equivalentes a entes públicos como clínicas privadas. Por lo tanto, en base a eso, fueron capaces de justificar la existencia de determinados servicios mínimos y también ciertos equipos de emergencia asociados.

GRUPOS

Sobre si al momento del estudio se establecieron ciertas unidades como prioridad, como podría ser la urgencia, o se tomaron en cuenta todas las que pueden existir en un recinto, Márquez indicó que el flujo de pacientes normal proviene básicamente de algunos grupos.

Uno que al momento de la huelga estaban hospitalizados o estaban asociados a un determinado tratamiento, como los dializados o los oncológicos, recordando que los últimos dictámenes del Ministerio de Economía estableció que cuatro empresas son consideradas estratégicas y bajo esa condición no están sujetas a estar en huela. La autoridad, explicó, entendió que eso, para el caso de los diálisis, era absolutamente dependiente respecto de la oportunidad de atención.

En el segundo están las personas que llegan a los servicios de urgencias, con mayor o menor gravedad y que merecen ser atendidos definidos su diagnóstico y tratamiento a seguir.

El tercer foco son aquellos que son derivados de planes cerrados de isapres o del Fonasa. Son todos los casos que provienen desde los servicios de Salud, los que han establecido convenios, por medio de una licitación, con distintos prestadores a lo largo del país para la atención de pacientes críticos que ellos no tengan la capacidad instalada para poder atenderlos. “Por ende, al momento de un huelga se pueden encontrar estos flujos de pacientes“, apuntó.

Con todo esto, el profesional manifestó que con esta mirada de procesos e integralidad de la atención, una persona que ingresa, que sea hospitalizado y requiera intervención quirúrgica, necesita una serie de otros servicios anexos de los cuales depende la calidad de la atención, la oportunidad y la seguridad con que se otorga. Todas estas definiciones no fueron antojadizas ni fruto de la experiencia en el ámbito clínico, pero están sustentadas en normas, leyes, regulaciones, pautas y recomendaciones que de la autoridad han emanado.

El interés público debiese orientarse hacia la búsqueda de fórmulas que acoten los riesgos de la interrupción de los servicios asistenciales en caso de huelga de un prestador de salud, por los impactos que una inadecuada definición de los servicios mínimos, así como de los respectivos equipos de emergencia, pudiese provocar en la salud de la población involucrada, vulnerando de ese modo bienes jurídicos supremos como son la vida y salud establecidos en la Constitución Política de Chile.

“HAY QUE PENSAR EN LA SEGURIDAD DEL PACIENTE”

Acerca de esta iniciativa de Clínicas de Chile, el gerente general de Clínica Sanatorio Alemán (CSA), Jorge Plaza de los Reyes, sostuvo que “nos parece adecuado que se trate de mostrar técnicamente, a nivel de industria, el impacto que pueda generar la adecuada asignación de servicios mínimos, especialmente pensando en la seguridad del paciente”.

En el caso del centro asistencial de Pedro de Valdivia, el ejecutivo sostuvo que llegaron a un acuerdo interno de servicios mínimos con los sindicatos, los cuales fueron validados por Dirección del Trabajo. Además tuvieron negociación colectiva recientemente, llegando a un acuerdo con todos los gremios de la empresa de salud.

Sobre los aspectos que cree que son comunes de este estudio a lo que hacen como CSA, dijo que son los servicios mínimos para una clínica u hospital en forma general. “Se debe tener en consideración las realidades de regiones y el nivel de complejidad que posee cada centro asistencial“, remarcó.

-Los servicios mínimos se deben definir en un momento previo a la negociación colectiva, porque en ese proceso es posible llegar a una paralización legal.

-“Nos parece adecuado que se trate de mostrar técnicamente, a nivel de industria, el impacto que pueda generar la adecuada asignación de servicios mínimos, especialmente pensando en la seguridad del paciente“. Jorge Plaza de los Reyes gerente general Sanatorio Alemán

-“Nos parece muy lógico que cuando hay una huelga queden funcionando todos los servicios de urgencia, también era clave que se entienda que para que esos servicios queden funcionando, se necesita una serie de prestaciones y acciones que se realizan dentro de distintos lugares de las clínicas“. Ana María Albornoz, gerenta de Clínicas de Chile.

Fuente: El Sur _Concepción