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12:41 pm el 3 de Enero del 2022

Tras casi dos años, el covid-19 deja de ser la principal causa de muerte en Chile

Hoy se ubica como el tercer mayor motivo de fallecimientos en el país. La vacunación y la caída de los contagios surgen entre las principales razones de la disminución.

Fuente: El Mercurio

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Faltan solo dos meses para que se cumplan dos años desde la llegada del covid-19 al país y se diera inicio a una de las crisis sanitarias más grandes de la historia del país.

A la fecha se contabilizan más de 1,8 millones de contagiados, mientras que más de 39 mil personas han perdido la vida por la enfermedad, aunque esta cifra sube a más de 50 mil si se consideran las víctimas que aún figuran como casos sospechosos en los análisis del Ministerio de Salud.

Pese al enorme impacto que ha generado el coronavirus en Chile, la situación actual está lejos de parecerse a los peores días de la emergencia: los contagios se han mantenido a la baja durante los últimos meses y lo mismo ha sucedido con las hospitalizaciones en unidades de cuidados intensivos y, por lo mismo, con las muertes.

De hecho, luego de once meses consecutivos en que el covid-19 figurara como la principal causa de fallecimiento en el país desde la llegada de la pandemia, con la mejoría del escenario cedió ese penoso sitial y figura como la tercera razón. Ahora le anteceden las enfermedades del sistema circulatorio y los tumores, males que históricamente han aparecido al tope de la lista.

Juan Carlos Said, máster en salud pública, asegura que ‘lo que estamos viendo es que hay un mejor control de la pandemia, donde los casos en general se han mantenido en cifras que son manejables, que también las hospitalizaciones se han observado en rangos que si bien no son de la normalidad prepandemia, sí son cifras de las cuales el sistema de salud se puede hacer cargo’.

El especialista agrega ‘tampoco podemos olvidar que donde primero impactan las vacunas es en la mortalidad; después, en hospitalización y luego en contagios. Ahí es donde más efectivas son, por lo que ese es el primer indicador que baja’.

Y aunque las cifras han caído notablemente, la llegada de la variante Ómicron y el gran número de infecciones que ha generado en el hemisferio norte alertan a los expertos sobre la posibilidad de una nueva ola.

Jaime Burrows, exsubsecretario de Salud Pública, proyecta que el que ‘no haya un aumento de la mortalidad por covid-19 va a depender de la presencia o no de una nueva ola de casos. Si bien en esta nueva variante, Ómicron, los casos son más leves, el gran número de ellos hace que los pacientes graves igualmente puedan generar números importantes, como está sucediendo ahora en Europa. Lamentablemente, nos tenemos que anticipar de nuevo y creo que el Gobierno lo está haciendo, porque lo que pasa en Europa llega rápido acá: ya está pasando en Argentina, con una explosión de casos, y probablemente a nosotros también’.

El impacto del retraso
Si bien la cantidad de muertes por covid-19 ha disminuido en los últimos meses, en 2021 más de 22 mil personas fallecieron a causa del SARS-CoV-2, es decir, 35% más que en 2020, cuando fueron cerca de 16 mil (las primeras en marzo).

Por lo mismo, Jeannette Dabanch, infectóloga del Hospital Clínico de la Universidad de Chile, advierte que el país podría estar experimentando un incremento de las muertes por enfermedades del sistema circulatorio y cánceres debido a la postergación de miles de atenciones durante los meses más complejos de la pandemia.

La especialista alerta que ‘es un problema que se ha repetido en todas partes del mundo: la postergación de otras patologías, que es lo que nos pasa también. Hoy tenemos pacientes mucho más graves o que debieron posponer o retrasaron sus tratamientos y los vemos en una fase más avanzada, especialmente en los cánceres. He visto mucho más endocarditis que otros años, que es una afección al corazón que si es diagnosticada precozmente podemos evitarla. Hemos tenido pacientes con leucemias que lamentablemente tuvieron que retrasar sus quimioterapias y los hemos atendido en fases refractarias. Es lo que ha pasado en todo el mundo’.

Said indica que ‘es muy probable que experimentemos un aumento de la mortalidad por enfermedades como cáncer o patologías del sistema circulatorio. Pero ese aumento no es inmediato. Cuando una persona deja de asistir a un screening por un tumor o pierde los controles de rutina, eso no significa un incremento de la mortalidad al mes siguiente. Los tumores no se desarrollan en una o dos semanas, sino que en varios meses e incluso años. Entonces, es muy probable que veamos un incremento de la mortalidad asociada al cáncer, pero vamos necesitar que pase un tiempo para ver el impacto de eso’.