Salud cree que circulación de nuevas variantes puede explicar alza de contagios

La situación de la pandemia en Latinoamérica, al igual que en Chile, es compleja. Países como Brasil, con niveles de infectados muy altos, ya han reportado nuevas variantes del covid que pueden ser más contagiosas, por lo que el riesgo del tránsito internacional se hace cada vez más presente.

En ese contexto, el Ejecutivo anunció ayer nuevas medidas para el aeropuerto internacional Arturo Merino Benítez, en Santiago, el único paso fronterizo de Chile que sigue abierto: ‘Toda persona que ingrese al país desde el 31 de marzo deberá trasladarse a un hotel de tránsito por cinco días y hacerse un PCR en nuestro país. Los (cinco) días restantes puede hacer la cuarentena en su hogar si es negativo o residencia sanitaria si es positivo’, dijo el ministro secretario general de Gobierno, Jaime Bellolio.

El costo de la residencia sanitaria correrá por cuenta del viajero, salvo quienes hayan empezado su viaje antes del 27 de marzo. Bellolio agregó que ‘no es el momento para viajes, no es el momento para turismo’.

Cepas virales

Si bien ya se habían adoptado medidas para evitar el ingreso de nuevas cepas, algunos expertos plantean que ya podría existir transmisión comunitaria de algunas de esas variantes.

El propio ministro de Salud, Enrique Paris, advierte que ‘la cepa brasileña es mucho más potente, más contagiosa’.

El Instituto de Salud Pública (ISP) ha detectado 64 pacientes con la cepa británica y 45 con la brasileña en Chile. Paris reconoce que ‘esos son los casos que logramos detectar. Pensamos que la circulación de nuevas variantes puede ser una explicación para el gran aumento de contagios que hemos tenido en este último tiempo’.

Heriberto García, director del ISP, señala que ‘lo que se ha detectado ahora desde el punto de vista de la OMS es que la variante brasileña está en toda Sudamérica; por ende, que llegara a Chile iba a suceder’.

Con todo, prevé que ‘como Chile, tenemos una ventaja comparativa (…), porque la velocidad de vacunación nos puede permitir controlar el fenómeno. Pero si nos demoráramos mucho en vacunar, el fenómeno sería más probable’.

De los casos detectados, cerca del 88% son pacientes de 20 a 39 años, chilenos, que ingresaron desde Brasil, México o Perú.

El exministro Jaime Mañalich aseguró en su Twitter que ‘si Brasil no mejora, todo (el) esfuerzo puede perderse. El cierre de fronteras con Brasil, Perú y Ecuador debe ser total, mientras no haya test de antígenos para todos en el aeropuerto’.

Para el jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos de la Clínica Indisa, Sebastián Ugarte, en esta segunda ola el perfil de pacientes que están recibiendo ‘se agrava tremendamente en menos de 24 horas y hay que conectarlo a ventilación’.

Durante la primera ola, en cambio, esa evolución se podía dar en casi una semana, según el médico. A su juicio, este aceleramiento del deterioro de los pacientes podría originarse en que ‘nuevas variantes, que tienen un comportamiento más agresivo, estén circulando comunitariamente’.

En el mismo contexto de inquietud por las nuevas cepas, Argentina anunció ayer la suspensión indefinida de los vuelos provenientes de Chile, Brasil y México, desde mañana.