Noticias

11:14 am el 7 de Febrero del 2020

En últimos diez años, solo las coberturas de mujeres en isapres han empeorado y llegan a pagar 62% más que hombres por un plan

Afiliadas destinan más dinero por sus planes, aun cuando tienen edad similar y la mitad de cargas que los varones. De acuerdo con datos, ellas usan hasta dos veces más la red de salud.

Fuente: El Mercurio

La diferencia es brutal”, asegura Carolina Muñoz (35). El plan de salud que contrató hace un par de años en una isapre le significa destinar más de $130 mil todos los meses. Sin embargo, su pareja, Francisco Gómez (37), paga poco más de $70 mil, es decir, casi la mitad, por un plan con coberturas médicas muy similares, aunque con una mejor red de atención, incluso más completa.

El escenario que vive la ingeniera santiaguina está lejos de ser una excepción en el sistema de salud privado. Por años se ha puesto énfasis en las diferencias que realizan las aseguradoras según sexo, y aunque existe consenso en que se debe avanzar en una reforma para terminar con esta situación, tras más de diez años de debate aún no se logra.

Ante este escenario, la Superintendencia de Salud realizó el “Diagnóstico de Género del Sector Salud”, con el cual detectó las brechas que afectan a los afiliados del sector privado y cómo variaron las condiciones de los planes, el gasto en prestaciones de salud, licencias médicas y coberturas entre 2008 y 2018.

De acuerdo con el análisis, en el caso de las afiliadas, en promedio, tienen una renta imponible de $1,1 millones, similar a la de los hombres ($1,2 millones). Sin embargo, pagan más que ellos por sus planes, aun cuando tienen una edad similar y la mitad del número de cargas que los hombres (ver infografía). En total, gastan, en promedio, $135 mil mensualmente, 53% nominal más que si se compara con lo que destinaban en 2007 ($88 mil).

Las diferencias por género se elevan aún más en los años en que la mujer puede ser madre. Por ejemplo, mientras un hombre de 30 años paga por un plan $70 mil, una mujer de la misma edad paga $113 mil, 62% más. La brecha se va reduciendo hasta llegar a los 65 años, cuando los montos se invierten y los hombres pagan más que las mujeres. Así, a los 85 años, un varón paga $193 mil y una mujer, $165 mil.

Isabel Plá, ministra de la Mujer y la Equidad de Género, asegura que “la brecha de género que se observa en el sistema isapre, en precios de planes y en coberturas, es similar a la que afecta a las mujeres en casi todas las áreas: es mayor en la edad reproductiva y conlleva evidentemente un castigo a la maternidad, como si fuera la única responsable”.

De los más de tres millones de cotizantes que tienen las isapres, cerca del 45% son mujeres. Según el superintendente de Salud, Patricio Fernández, “históricamente se ha cargado desproporcionadamente la mano a ellas y se las ha discriminado constantemente en el sistema de salud privado. Eso tiene que terminar”.

Uso de la red

Si se analiza la evolución de las coberturas de los planes en la última década, la brecha entre hombres y mujeres se ha hecho cada vez más grande, lo que se traduce en copagos mayores para ellas, es decir, deben desembolsar más dinero por una misma atención.

Las coberturas de los planes de mujeres pasaron, en promedio, de 66,3% en 2008 a 61,5% en 2018. En cambio, en el caso de los hombres la cobertura se mantuvo en 67,8%.

A juicio del superintendente, “las isapres, por lo general, les ofertan planes a las mujeres con coberturas más bajas que a los hombres, porque ellas demandan mucho más el sistema de salud; por lo tanto, le resultan más costosas a la aseguradora”.

Según el estudio de Salud, efectivamente las mujeres hacen un mayor uso de la red de salud, lo que significa un mayor costo para las aseguradoras. Si bien desde los 5 y hasta los 55 años las mujeres utilizan más el seguro, entre los 30 y 34 años es cuando la diferencia es más notoria. Mientras un hombre genera gastos en prestaciones por cerca de $500 mil, una afiliada gasta más de $1 millón, en promedio.

Algo similar sucede con el uso de licencias médicas. Las afiliadas gastan 1,6 veces más que los hombres. Esto sin considerar las licencias maternales y por enfermedad grave del hijo.

Para Victoria Beaumont, directora de la Fundación Politopedia, es urgente avanzar en cambios legislativos para terminar con las brechas. Al respecto, advierte que ‘el aparato legislativo no está dando el ancho; las reformas se demoran años en salir’.

Para hacer frente a ese panorama, la Superintendencia de Salud ha avanzado en la regulación del sistema mediante la vía administrativa. De esta forma, terminó con los planes reducidos en cobertura del parto y desde abril lo hará con las diferencias de precios en los planes entre hombres y mujeres.

Captura de Pantalla 2020-02-07 a la(s) 11.04.06 a. m.