Salud detecta el origen del contagio en seis de cada diez nuevos casos de covid-19
Saber dónde y con quién se infectó una persona permite controlar el avance del virus y realizar medidas de aislamiento focalizadas, sin necesidad de recurrir a cuarentenas masivas.
El 3 de marzo, cuando se confirmó el primer caso de covid-19 en Chile, el Ministerio de Salud anunció que comenzaría la búsqueda de cerca de 80 personas que podían haber tenido contacto con el contagiado.
En ese momento, la denominada trazabilidad emergía como una estrategia básica para contener la pandemia y debía repetirse con cada positivo para aislar la enfermedad y evitar la propagación a gran escala.
Sin embargo, según expertos, fue esa labor la que fracasó, y con el pasar de las semanas el virus continuó expandiéndose y determinar el origen de los contagios y trazar a sus contactos quedaron como materias pendientes.
Conocer el nexo epidemiológico es saber dónde se infectó la persona. Aunque eso no quiere decir necesariamente que ese nuevo caso ya había sido trazado, es decir, Salud se había contactado con él y lo había aislado.
De acuerdo con el último informe epidemiológico del Ministerio de Salud, del total de pacientes que son confirmados con covid-19 en el país, en el 63% se puede determinar aquel vínculo, es decir, la autoridad sanitaria es capaz de establecer el origen de la infección.
Por ejemplo, en la última semana, de los 16.497 contagiados, 10.404 corresponden a contactos estrechos de pacientes que ya habían adquirido el virus. Si se compara con mayo, el escenario ha mejorado: entonces, el sistema solo era capaz de precisar el 40%.
Jorge Pérez, académico del Departamento de Ciencias de la Computación de la U. de Chile, asegura que “este indicador es importante porque la autoridad sabe las personas que pueden estar contagiadas, y por lo tanto, se puede actuar muy rápido haciendo cuarentenas focalizadas en localidades muy pequeñas. Si empiezan a llegar pacientes que no sabes con quiénes tuvieron contacto y dónde se contagiaron, no queda otra que cuarentenar toda la región”.
Aunque advierte que “es distinto que alguien salga positivo y que al preguntarle, diga que fue contacto de alguien confirmado, a haber tenido trazada y aislada a esa persona como sospechosa. Salud informa cuántas personas positivas eran contactos de un contagiado, pero eso no quiere decir que hayan estado trazadas”.
Cristóbal Cuadrado, secretario técnico del Colegio Médico, afirma que “la forma que esperaría que se hiciera este cálculo es cruzar los contactos estrechos que Salud mantiene registrados, con los nuevos contagiados. Eso sí garantiza que el sistema está identificando precozmente a los casos secundarios”.
Contener los brotes
Según los datos de Salud, en la última semana en la RM se detectó el nexo epidemiológico del 62% de los nuevos casos. En el plan Paso a Paso, para acceder a la etapa de apertura inicial, es decir, levantar totalmente las cuarentenas, este indicador debe ser superior a 60%.
En la mayoría del país ya se cumple con esta exigencia y, por el momento, las regiones que no alcanzan este estándar son Arica (55%), Antofagasta (51%), Coquimbo (57%), Ñuble (56%), Los Lagos (56%) y Magallanes (57%).
Catterina Ferreccio, epidemióloga y miembro del Consejo Asesor Covid-19, plantea que lo “ideal es que en el 80% de los casos se pueda saber dónde se infectaron, con quién y cuándo. Eso es tener un control real de la epidemia y eso permite que la ciudad siga funcionando, porque si sabes de dónde vienen los casos, la autoridad los puede aislar y parar la transmisión. Pero si no tienes idea de dónde viene, lo único que puedes poner son más ventiladores y hacer cuarentenas“.
Por su parte, Cuadrado afirma que “para tener un brote bajo control, el 90% de los casos deberían ser secundarios“.