Usuarios ponen nota roja al desempeño de Salud para enfrentar las listas de espera

Resultados del cuestionario muestran baja confianza en el cumplimiento de los compromisos del Gobierno en el área.

Fuente: EL MERCURIO

INSTITUTO DE SALUD PÚBLICA DE LA U. ANDRES BELLO

Si fuera la nota final de un curso académico, la administración de salud del Gobierno tendría que repetir el ramo. Así de baja es la evaluación al sector que hacen los entrevistados en la VIII versión de la Encuesta sobre el Sistema de Salud Chileno que realizó el Instituto de Salud Pública de la Universidad Andrés Bello (UNAB) junto a GfK Adimark.

El cuestionario se aplicó cara a cara a 1.203 personas mayores de 18 años del Gran Valparaíso, Gran Concepción y la Región Metropolitana, entre mayo y junio. Sus resultados muestran que el 74,8% de los encuestados pone nota 4 o inferior al desempeño de la actual administración, esto es 20 puntos más que quienes evaluaron con nota roja al Gobierno cuando llevaba tres meses de gestión, a mediados de 2014 (54,8%).

Donde más aumentó el descontento es entre los adultos mayores (14,4 puntos) y los afiliados a Fonasa (10,3 puntos), “que es la población hacia la cual la Nueva Mayoría ha dirigido su discurso en salud”, dice Manuel Inostroza, académico de la UNAB.

Los encuestados señalan al Ministerio de Salud, la Superintendencia de Salud y los prestadores (hospitales y consultorios) como los principales responsables de los problemas del sector público, y a todos ellos los reprueban.

El Ministerio de Salud es la entidad que logra las peores notas: obtuvo un 3,2 en su quehacer frente a las listas de espera; un 3,3 en la supervisión para que se atienda oportunamente la gente, y 3,2 en supervisar que los pacientes reciban una atención de calidad (ver infografía).

Estas calificaciones fueron puestas por la gente cuando se conocía que la lista de espera del sector público en mayo ascendía a 1,9 millones de atenciones pendientes y se formó una comisión médica asesora convocada por la cartera para analizar los casos de personas que murieron esperando una atención que mañana entregará su informe final.

Solo en 2016 fueron 24.817 las personas que fallecieron estando en lista de espera no AUGE y 993 que murieron teniendo una atención AUGE pendiente.

Sobre la espera de personas que murieron necesitando una atención AUGE -de 665 días, en promedio, considerando los casos desde 2005 a la fecha- la ministra de Salud, Carmen Castillo, aseguró esta semana que “nosotros hemos tomado conocimiento de que existen situaciones en las cuales ha habido retrasos. Veremos específicamente estos casos que son extraordinarios y escapan a una norma habitual”.

Desconfianza

La encuesta de la UNAB mostró también que el 77,4% no confía en que este gobierno resuelva sus problemas de salud (en 2015 era el 74,3%). E incluso tres de cada cuatro dudan que se cumplan compromisos que ya están en marcha como la creación del fondo de fármacos para enfermos crónicos, el fondo de tratamientos de alto costo o también llamado “Ricarte Soto”, o la ley que busca despenalizar el aborto en tres causales que fue aprobada por el Congreso, pero que hoy comienza a ser analizada por el Tribunal Constitucional.

“Este es un fracaso para la Nueva Mayoría respecto de su gestión en salud. Esta administración de Michelle Bachelet partió con buenas expectativas y se desplomó“, dice Inostroza. En 2014 la gente le ponía un 4,4 de nota al gobierno actual, esto es 0,4 puntos más que al de Sebastián Piñera. Pero ahora su calificación cayó a 3,4.

“Eso quiere decir que en salud se requiere una política de Estado, que convoque realmente y que sea menos ideológica“, recalca el académico.

MUESTRA

Se encuestó a 1.203 personas, mayores de 18 años, afiliados a isapres y Fonasa.

Las autoridades del sector también fueron reprobadas

A los encuestados también se les pidió evaluar a las autoridades nacionales y regionales (de Valparaíso, Santiago y Concepción).

La ministra de Salud, Carmen Castillo, es la que logró un mayor conocimiento entre los encuestados (67%), seguida por la seremi del ramo de Valparaíso, Graciela Astudillo, y la directora nacional de Fonasa, Jeanette Vega.

Esta última es, a la vez, la que obtiene una mejor evaluación, aunque con una nota 3,8. Igual calificación tuvo el seremi de Biobío, Mauricio Careaga. Con un 3,7 la siguen la ministra Castillo; el director de Cenabast, Pablo Venegas, y el seremi Metropolitano, Carlos Aranda.

Los subsecretarios de Redes Asistenciales, Gisela Alarcón, y de Salud Pública, Jaime Burrows, tuvieron ambos un 3,6.

Fuente: EL MERCURIO